Última Hora (viernes 26): Comunica el Foro por la Memoria del Valle del Tiétar y la Vera que, por previsible inestabilidad climatológica, se POSPONE la prevista inauguración el próximo sábado del Memorial Antifranquista en Santa Cruz del Valle (Ávila). Os tendremos al corriente.
El próximo sábado 27 de abril se inaugura en Santa Cruz del Valle el Memorial que
rinde homenaje a los republicanos allí fusilados en septiembre de 1936. Santa Cruz contaba entonces con algo más de 1000 habitantes.En las elecciones municipales de 1936, la provincia de Ávila se ganó el título de capital de la resistencia en Castilla. Superando el 80% de participación electoral y quedando solo cuatro puntos por debajo de los resultados del centro derecha, las candidaturas del Frente Popular lograron el apoyo del 34.1% del electorado.
La resistencia al “alzamiento” se produjo desde el primer día, esencialmente en la
zona sur de la provincia y en condiciones tan difíciles como heroicas, persistió hasta
octubre de 1936. Ante la completa hegemonía de los sublevados en el ejército y la
criminal actividad de las bandas falangistas, la emergencia y extensión de milicias
locales abulenses en pueblos como La Adrada, Mombeltrán, Candeleda ó Peguerinos,
se realizó “con lo puesto”. Baste señalar que no fueron legalmente reconocidas
por el gobierno republicano hasta noviembre de 1936 y por cierto, sin garantías de
suministro de armamento. Se trató de milicias compuestas mayoritariamente por
gentes de origen social campesino que más tarde se incorporarían como tales a la
Columna Mangada procedente de Madrid y resistirían, con numerosas bajas, hasta su
retirada a Robledo de Chavela en octubre y más tarde a Madrid para integrarse en la
12 Brigada Mixta.
El Memorial de Santa Cruz rinde homenaje a los fusilados allí por el fascismo, un
homenaje extensible a todos los asesinatos de civiles republicanos en la región
(Candeleda, Poyales… que también cuentan con Memoriales) y se añade pues al
mapa de lo que el antifascismo europeo denomina “Lugares de Memoria”.
Y los Lugares de Memoria, lo son de digno reposo de nuestras víctimas y también
de vindicación de nuestra Resistencia es decir, de homenaje y reconocimiento a las
milicias locales, a aquellos “Campesinos del Tiétar” que lograron que la Columna
Mangada creciera y mantuviera un frente permeable, de imprecisas fronteras, que
por su mera existencia fue un referente salvador para cientos de hombres y mujeres
evadidos del franco-fascismo impuesto en provincias limítrofes.
Ni su nombre ni su ejemplo se borrarán de la historia. No olvidamos.